jueves, 30 de julio de 2009

Perspectiva de una madre


“Tuve a mi bebé en mi casa”


"Dar a luz es una experiencia muy fuerte y vinculante, que debería ser la base de la vida familiar", dice Marcela, quien decidió alumbrar a su tercer bebé en su casa. Sus dos hijos anteriores habían nacido en un hospital; en ambos casos le costó concentrarse en el parto, en medio del incesante ir y venir de médicos y enfermeras. "Yo tenía la sensación de que debía pedir disculpas cada vez que me quejaba", recuerda.


La tercera vez no fue así. Marcela dio a luz a su bebé en su dormitorio, acompañada sólo por una partera y su marido. La partera había atendido a Marcela durante todo el embarazo; realizó las habituales visitas prenatales y la asesoró sobre cómo manejar los cambios que experimentaba su familia en aumento. "Las parteras son estupendas educadoras —dice Marcela —.


Mis visitas parecían más sesiones de asesoramiento que consultas médicas." Antes de acceder al parto en el hogar, la obstetra la había interrogado a fondo para saber si estaba en condiciones, si tenía dudas o trastornos médicos que la pusieran en una categoría de alto riesgo; además le informó acerca de todo lo que podía salir mal. Finalmente le hizo firmar un documento por el que se hacía responsable del resultado y aceptaba el traslado a una sala de emergencia en caso necesario.


Llegado el gran día, la partera se presentó cuando Marcela tenía seis centímetros de dilatación. Una hora después, cuando rompió aguas, la dilatación era de ocho centímetros. Desde ese momento en adelante la obstetra le aplicó periódicamente compresas calientes en la zona perineal para reducir la posibilidad de desgarro.


Cuando el parto pareció detenerse, Marcela y su marido pasearon por la casa y pasaron un rato a solas. Cuando se intensificó el impulso de pujar, llamó a la partera a su dormitorio. Después de pujar durante catorce minutos nació la niña, y su padre cortó el cordón. La pequeña bebé fue higienizada. También se examinó a Marcela para comprobar que todo estuviera bien.


Consejos de Marcela para quienes piensan dar a luz en su casa:


• Busque una partera con quien se entienda bien. Es menester que pueda discutir con ella sus miedos y sentimientos en total confianza.
• Asegúrese de no tener dudas sobre el parto en casa y de que su compañero tampoco las tenga. "Si no estás segura, no lo hagas", dice Marcela.
• Lea el material adecuado. Concéntrese en libros que encaren el parto como un proceso normal y saludable, no como un trastorno médico.


No hay comentarios:

Publicar un comentario